Esta es una historia que inicia con la oscuridad de la nada, en el tiempo sin tiempo. Es una historia sobre URUKU El Fuego, BUINAIMA El Hombre y GAIMA JUCO El Jaguar. Comenzamos con un prólogo en donde el narrador presenta al público el espíritu del fuego y la historia del hombre y el jaguar y como éste último a través de sus enseñanzas se convierte en padre de la cultura. Luego entramos al tiempo del mito, mostramos la creación a partir de la oscuridad y la luz. Las criaturas vivientes y la naturaleza y finalmente al hombre. El hombre es una criatura voraz lo que lo lleva a un conflicto: roba a los cerdos salvajes su alimento. Aparece el jaguar y lo salva. El jaguar convence al hombre de acompañarlo a su maloca. El jaguar decide que el hombre será su aprendiz y le enseña todos sus secretos: el secreto de las plantas para curar enfermedades, el secreto del cultivo de la tierra, el secreto de la caza con arco, flecha y cerbatana, el secreto del fuego y de las piedras. Pero lo más importante es el secreto de la medicina sagrada y la cocción del bejuco del Yagé. Entramos a un tiempo de misterio y de sueño lucido, de sueño con los ojos abiertos y de la expansión de la conciencia. Es un rito de paso para el hombre y una experiencia límite y trascendental que le permite conectarse consigo mismo y las energías de la naturaleza. Finalmente el hombre comienza a sentir tristeza por su gente y desea regresar con ellos, por tal razón traiciona al jaguar, decide escapar con el fuego, con todos los secretos aprendidos, excepto el secreto de la inmortalidad. Así, el Jaguar se convierte en el ancestro del hombre y en el dador de su acervo cultural.